El título puede parecer cínico, sobre todo porque aparece en pantalla después del hallazgo de un cadáver. ¿La muerte como acto de amor definitivo, como en La pianista (2001)? No, algo ha cambiado en Michael Haneke: por primera vez, ha rodado un film infnitamente triste. Quizás es muy fácil conmover cuando se encierra a un anciano y a su mujer, y la cámara registra la decadencia, la pérdida de referentes. Y la supervivencia del amor, el temblor de dos monstruos gentiles reconociéndose en los balbuceos de la enferma y en la desesperación taimada del cuidador.

Austria 2012 - 120 min

VOS en castellano

No recomendada menores de 12 años

Formato: 35 mm

Funciones: jueves 16, 20.15 h., viernes 17, 20.15 y 22.45 h. y sábado 18 , 17.15 y 20.15 h.

Entradas: 3 euros (carnet joven, + 65 años, desempleados, 2 euros)

Sesiones del espectador: viernes 22.45 h y sábados 17.15 h (precio único, 1.50 euros)

Venta de entradas: en taquilla desde media hora antes

Venta anticipada: en el ambigú, de lunes a viernes de 9.30 a 13 h y de 16.30 a 20.30 h